Este viernes concluyó el Festival de Viñedo del Mar, el que, encima de la músic y el humor, estuvo impresionado por manifestaciones tanto fuera como en el interior del decorado. Frente a una nueva interpretación del certamen, el Gobierno relizó un positivo cálculo.
“Hubo un grupo de violentistas que intentaron sabotear el Festival de Viña del Mar”, dijo el subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli, afirmando que hubo unas mil personas que participaron en la primera etapa del certamen mientras que otro rama quisieron ingresar a la Villa Vergara.
“Sacamos delante, probablemente, el festival más difícil de la historia“, señaló Galli respaldando el desempeñarse de la policía, el que fue coincidente al “resguardo de la seguridad y el orden conocido del división”.
“El rol de la policía es resguardar la seguridad y el orden público, y aquí lo que se hizo fue resguardar contra un grupo que a través de la violencia intentó sabotear el festival. Lo que fue impedido por la policía lo que implicó concentrar al personal policial en el resguardo de la Quinta Vergara”, agregó.
Frente a la violencia ocurrida en la ciudad en las horas previas al crecimiento del espectáculo, Galli llamó a no minimizarla, instando a “separar las legítimas demandas sociales de la utilización de la violencia con cualquier explicación, eso tiene que ser condenado”.
El Presidente Sebastián Piñera asimismo aludió a los hechos de violencia ocurridos en las cercanías de la Plaza Vergara, y a través de un video difundido en las Redes Sociales, estimó que hubo intenciones de siniestrar el histórico circuito que albergó el Festival: “Viernes, este es el día último del Festival y van a querer hacer o algunos quieren hacer incendiar la Quinta Vergara”, manifestó.