Se realizó el evento más importante de lucha desocupado en los Estados Unidos: Wrestlemania 34, donde se dan cita solo los mejores, para aplaudir un espectáculo único en su tipo, que en esta ocasión contó con un sabido de 78,133 fanáticos, en el Superdomo Mercedes Benz en Nueva Orleans.
El cartel lucía impactante, pero uno de los eventos que más interés causaba, era el estreno de la excampeona de Artes Marciales Mixtas (AMM), Ronda Rousey, ahora en su nueva circunstancia como luchadora profesional.
Desde que apareció, la fanaticada se le rindió, y de hecho, el queja de “Let´s Go Ronda (Vamos Ronda)”, fue uno de los que más se escuchó durante toda la velada de lucha rescatado.
Ronda hizo pareja con Kurt Angle, para carear a la divisa Triple H, acompañado por Stephanie McMahon, con quienes ya había tenido varios desencuentros.
Ronda dio cátedra, con sus mejores movimientos de AMM y lo que ha aprendido de lucha autónomo, por lo que los fans se le entregaron en cada movimiento, y es que, hay que decirlo, sigue luciendo un físico deseable, aunque todavía cerca de destacar que Triple H ya tiene 48 abriles, aunque Kurt Angle está por cumplir 50.
A Stephanie, a pesar de sus trampas, la pudo dominar completamente, dejando en claro que Ronda viene por todo a la WWE…
Pero uno de los momentos más impactantes de la confusión, fue cuando Ronda levantó a Triple H, que es congruo pesado:
Ronda se vio ágil, cachas y conectada con el conocido, tres medios básicos para que se convierta en una de las consentidas en muy poco tiempo:
Este es solo el inicio de lo que promete ser el holgado camino de la nueva reina de la lucha vacante en los Estados Unidos…
¡Vamos Ronda!