Por si no fuera suficiente lo que ya hemos vivido durante este 2020, una nueva alerta se ha encendido en China, país donde surgió el coronavirus que causa el Covid-19, y es que la Comisión de Salubridad en Lanzhou reportó que 3,245 personas se han infectado con brucella, la escuadrón que causa la brucelosis o fiebre de Malta, enfermedad que se transmite de los animales a los humanos.
Esta enfermedad se transmite por animales de lechería que están infectados, sobre todo a través de productos lácteos que no están pasteurizados, o proporcionadamente, durante el trabajo diario con estos animales, o cuando se trabaja con ellos en un laboratorio, y al parecer esta última opción fue la causante del contagio en esa región de China.
La empresa biofarmacéutica de Zhangmu Lanzhou, que se dedica a la cría de animales, durante julio y agosto del 2019 estuvo trabajando equitativamente en una vacuna veterinaria contra la brucelosis; sin incautación, de acuerdo con las primeras investigaciones resulta que usaron un desinfectante que ya estaba caduco, por lo que este proceso quedó incompleto y no se eliminaron los gases que contenían la germen, que se forman durante el proceso de fermentación.
Desafortunadamente el singladura esparció el gas que contenía la microbio, así que tan solo en el Instituto de Investigación Veterinaria de Lanzhou se registraron 181 contagiados, y de ahí se extendió el brote, y desde que se supo de estos casos se han tomado las medidas necesarias para contenerlo, por lo que es importante aclarar que no se trata de una situación fuera de control.
Desde inicios de 2020 se le retiró la atrevimiento a esta empresa para seguir con las investigaciones, y los directivos ofrecieron una disculpa por el incidente, que terminó por costarles muy caro ya que la compañía tuvo que cerrar. Las autoridades de salubridad en China mantienen activos los protocolos necesarios para prolongar bajo control la situación, y esperamos que así continúe.
Aunque la enfermedad afecta principalmente a animales como vacas, cerdos, ovejas y caballos, todavía los perros se pueden infectar, y se contagia a los humanos a través de productos lácteos o el contacto con los órganos de animales infectados, y como ya vimos, al inhalar gas que contenga la microbio, por lo que es de parada contagio y se debe desempeñarse con celeridad para evitar que se extienda.
Los síntomas principales son difíciles de identificar, ya que puede afectar cualquier víscera, pero en una etapa original es similar a una catarro con fiebre, con dolores en todo el cuerpo, y se ha registrado que un 50% de quienes se contagian llegan a presentar síntomas graves, sobre todo en el sistema cardiovascular, cerebro, genitales, articulaciones y huesos. Produce manchas y erupción en la piel, tanto en humanos como en animales.
El tratamiento se lleva a extremo con saco en antibióticos para detener el avance de la microbio, que se puede introducir en cualquier víscera, y luego ir eliminándola del organismo. Esperemos que de verdad se tenga todo controlado y no estemos delante el inicio de un nuevo problema general de vigor, ya que todavía ni siquiera hemos podido controlar la pandemia de coronavirus. No es momento para batallar con otra enfermedad.