La concurrencia antigua creía que en el pelambrera de una persona se encontraba su fuerza, por lo tanto, debían estar protegidos, poco así como la inscripción de Atleta.
La ciencia moderna recomienda cortarse el pelambrera de guisa regular, es más liviana para proseguir la higiene. Por lo tanto, podemos suponer audazmente que los héroes de la colección de hoy están atrapados en algún punto intermedio. Por un flanco, han adelgazado a fondo su flequillo y, por otro flanco, son muy reverentes con los ramos restantes y retuercen lo que se candela “peinado”:
1. Le pedí que me lo arreglara para que mi flequillo estuviera íntegro.
2. ¿Será el regreso de los Mullets?
3. Astuto, pero no entiendo cómo y por qué usar el madeja así.
4. ¿Se vio obligado a afeitarse todo para poder ponerse la máscara correctamente?
5. ¡Evitar en un cofia de invierno es el medio ambiente más importante del presupuesto acostumbrado!
6. Todos tenemos dos caras, pero pocos se animan a enseñar las dos todo el tiempo.
7. ¡Devuélvanle el flequillo!
8. ¿Son estos auriculares?
9. El bozo se convierte en patillas, o al revés.
10. No entiendes falta, ¡este es el estilo! Se fogata “Caballo”.
11. Supongo que el estilista era principiante.
12. Luceros en la cerviz.
13. Estilo dragón.
14. El rapabarbas puso toda su intención pero cero de talento.
15. ¿Cómo atraviesa la puerta?
¿Alguna vez has pasado un peinado ridículo y tienes una fotografía de él? ¡Déjalas en los comentarios! Comparte esta local con tus amigos estilistas para que no hagan un peinado así.
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