Con duras críticas fue recibido en la examen el documento firmado por 231 personeros de la exConcertación donde abogan por un llamado al Gobierno y todos los sectores a un “acuerdo nacional” para el período 2020-2022 que permita exceder la violencia ocurrida tras la crisis social.
El documento fue recibido con aquiescencia en el Gobierno y el oficialismo, y durante esta marcha sus firmantes salieron a evidenciar su tiro. Sin requisa, los actuales presidentes de los partidos que formaron el liga se desmarcaron del texto. Sobre todo, porque que fue difundido al día subsiguiente que el Presidente Sebastián Piñera pusiera sobre la mesa su idea de avanzar con destino a un Acuerdo por la Democracia, por la paz y contra la Violencia, para carear en mejor pie un mes de marzo que se prevé difícil.
“Tenemos un Gobierno que no quiere regir, no quiere hacerse cargo de los temas, eludir su responsabilidad y trata de endosárselas a otros”, dijo el presidente de la Democracia Cristiana, Fuad Chahin, aludiendo al mover del Ejecutor y la posterior carta del categoría rival.
El presidente del PS, Álvaro Elizalde, en tanto, si acertadamente señaló que “no voy a criticar la carta porque todas las iniciativas deben ser valoradas”, desestimó de plano la idea de un acuerdo como han planteado tanto el Gobierno como los personeros opositores firmantes del documento. “¿Desde cuándo el Gobierno ha necesitado un acuerdo nacional para hacer su pega?”, comentó el senador por El Maule, según señala La Tercera.
“Que el Gobierno no que busque falsas excusas para no asumir que ha sido sobrepasado por su ineptitud y su incapacidad para gobernar como claramente lo señalan la mayoría de los chilenos”, añadió.
En la misma ruta, Chahin planteó sus dudas respecto a la existente motivación de la filial Piñera para pedir acuerdos, recordando lo que ocurrió en los días posteriores al estallido. “Tenemos disposición, pero queremos tener claras las condiciones porque el Gobierno lo que hace son jugarretas y para eso no estamos”.
El Mostrador consultó al Partido por la Democracia (PPD) y el Partido Radical (PR) si sus timoneles Heraldo Muñoz y Carlos Maldonado, respectivamente, se iban a narrar a la carta, pero señalaron que no emitirán opinión al respecto por el momento.
“¿Qué quieren? ¿En qué están?”
Más enfático contra la carta firmado por varios de sus correligionarios, el senador socialista Carlos Montes incluso refutó el documento. “Esta es la segunda carta sobre lo mismo, esta es un poco mejor que la anterior, pero creo que es bueno que expliquen lo que quieren. ¿Qué quieren? ¿En qué están?”, dijo, aludiendo a que el mismo agrupación preparó misivas similares anteriormente.
De acuerdo al senador, las prioridades de la concurso hoy son otras, aludiendo al emanación de la campaña para el plebiscito del 26 de abril. “Tenemos que juntar fuerzas por el Apruebo y por la Convención Constitucional”, indicó.
Pese a la polémica, entre los firmantes del documento, fueron enfáticos en señalar que la propuesta no representa institucionalmente a los partidos del antiguo monolito gobernador. “No nos arrogamos la representación de ningún partido (…) Nadie firmó a nombre de nadie” explicó en Radiodifusión Pauta el senador socialista José Miguel Insulza, uno de los suscriptores del acuerdo.
La defensa de la carta
Durante esta marcha, al igual que Insulza, varios de los firmantes del documento “Es tiempo de un acuerdo nacional” salieran a defender la carta.
“Es una señal de que llegó el momento en que hay que ponerse de acuerdo en cuestiones fundamentales”, complementó el excanciller Mariano Fernández entrevistado en T13 Radiodifusión.
El exministro DC planteó encima que “esperamos que el acuerdo sea letrado como la voluntad de armonizar y unir al país no solo en el Parlamento, igualmente en el mundo social, empresarial e intelectual”.
Por su parte, el ex ministro de Educación y Obras Públicas, Sergio Bitar, dijo que si acertadamente admitió tener “diferencias menores” con el texto final, sostuvo que finalmente puso su firma porque “apunta a una cuestión central para el futuro de Chile”.
A querella de Bitar, desde el 18 de octubre se han cometido “dos errores grandes”. Por un flanco, “un Presidente que no entendió y una policía descabezada sin capacidad operacional que comete violaciones de DD.HH. Nadie que quiera el orden, puede dejar suceder situaciones de esa naturaleza”, indicó el ex ministro de Educación y Obras Públicas en Radiodifusión Duna.
Bitar todavía fue más allá e indicó que “pretender que el Gobierno de Piñera haga las reformas necesarias, no va a ocurrir. Mi visión es que empujemos el entendimiento para preservar las instituciones y la centroizquierda tenga la dispositivo para preparar una propuesta”.
Entre los temas urgentes, Fernández planteó que lo primero es enfocarse en la reforma a Carabineros. “Cuando se produjo el estallido social, fue sorprendido Carabineros mostrando una yerro de capacidad técnica en temas que le son propios. Quedó al descubierto una falta que nadie se esperaba”, indicó.
Por eso, aseguró que “una primera cuestión es que el Gobierno dé una señal nítida de reforma de la institucionalidad policial, de guisa que se vuelvan a ingresar el respeto de la concurrencia”.
Entre los firmantes que proponen un “Acuerdo nacional” para el período 2020-2022 aparecen incluso el diputado Pepe Auth y el senador Felipe Harboe (PPD), ex ministros como Enrique Correa, Soledad Alvear y su consorte Gutenberg Martínez, Mariana Aylwin (ex DC), Adriana Delpiano (PPD), los DC Jorge Burgos e Ignacio Walker, José Antonio Viera-Desafinación y Juan Gabriel Valdés (PS); encima de los exsubsecretarios Jorge Correa Sutil e Isidro Solís (PR), el exsenador Fulvio Rossi (ex PS), y igualmente personeros del mundo intelectual como Agustín Squella o Cristián Warnken.